El esfuerzo, el estudio y la perseverancia rindieron frutos y Karina González Yáñez, estudiante de Pedagogía en Biología y Ciencias Naturales, finalizó su proceso académico con nota 7. Un proceso que fue acompañado desde el año 2018 por el equipo del Plan de Inclusión y Acompañamiento Psicoeducativo (PIAP).
Paulette Neveu Lissi, integrante de PIAP, nos cuenta que “en términos generales, se apoya a los y las estudiantes en sus procesos de formación para favorecer oportunidades para la participación significativa en sus trayectorias universitarias, a través de la implementación de ajustes razonables y otras acciones que promueven la inclusión”.
En este mismo sentido y desde la otra vereda, Karina González es clara al valorar el rol de PIAP en su trayectoria educativa y en señalar que desde su visión el equipo ejerce “una labor no desde la caridad, sino con la evidente convicción de que todos debemos tener las mismas oportunidades de aprendizaje y de poder demostrar que, primero, somos sujetos de derecho, y segundo, que merecemos cumplir nuestros sueños, como cualquier ser humano”. Y agrega que “gracias a la mediación que ejerce PIAP y a que los académicos de la universidad tienen mayores chances de entender la discapacidad desde sus múltiples aristas, me pude sentir cómoda, comprendida y bajo la premisa de que mi aprendizaje podía ser evidenciado de distintas maneras, pues mis capacidades profesionales son exactamente equiparables a las de cualquier persona”.
Karina González Yáñez