Investigadoras área pedagógica del proyecto Tecnopol.
La encuesta en línea implementada por el proyecto Tecnologías Políticas de la Memoria y el Colegio de Profesores y Profesoras de Chile buscó conocer los usos que los docentes le han dado a documentos de memoria y derechos humanos en su práctica pedagógica. A la vez, la investigación tuvo por objetivo indagar en los motivos del no uso en otros/as profesores/as, y en aquellos elementos que podrían facilitar su utilización en el futuro.
La directora del proyecto y académica de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Alberto Hurtado, Oriana Bernasconi señaló que en el Conosur de América los archivos de derechos humanos emergieron como reacción a las dictaduras militares y también de los registros de las violaciones a los derechos humanos que estaban sucediendo y también de la resistencia, de la organización y de la vida social de esa época. En ese contexto, el proyecto se pregunta cómo cartas de presos políticos, testimonios de archivos de sobrevivientes, recursos de amparo, procesos de identificación de restos humanos, la gestión del asilo de quienes son perseguidos y noticias de prensa son usados hoy por actores distintos a las víctimas y en contextos diferentes a los de la denuncia, la justicia y la reparación para los que fueron producidos.
“Nos interesa conocer cuál es la imaginación que interroga al archivo, con qué preguntas, que diálogos propician, entre quiénes, con qué efectos, que vínculos generan, cómo se transforman nuestras relaciones con las otras personas, con las instituciones, cómo impacta en nuestra comprensión del mundo y con otros mediante sus usos y como estas apropiaciones contemporáneas amplían, renuevan y activan el archivo”, señaló.
No solo se usan para enseñar historia
Según el estudio, en Chile el uso de los archivos va más allá de las asignaturas que presentan de manera más evidente su inclusión en el currículum como son Historia y Ciencias Sociales, Lenguaje y Arte. Hay profesores/as que utilizan documentos de memoria y derechos humanos en orientación, ciencias, matemáticas, religión, y tecnología, entre otras asignaturas.
La encuesta señaló que un 69% de las y los docentes encuestados usan archivos de derechos humanos para enseñar a sus estudiantes sobre educación, salud, pensiones o seguridad social, un 62% usa documentos para enseñar sobre la dictadura, 61% para abordar la democracia y un 54% los utilizan para formación ciudadana. También los usan en otros temas como arte en dictadura, apagón cultural o en las letras de canciones populares. Mientras que la polarización y negacionismo, y seguridad, son las temáticas menos trabajadas con documentos.
Los niveles donde más frecuentemente se utilizan los documentos son séptimo básico (87%), primero básico (86%), octavo básico (82%), segundo básico (80%) y tercero medio (80%). La educación parvularia exhibe un nivel de uso inicial y exploratorio: un 40% de los/as profesores/as de este nivel indica que los utilizan una vez cada dos años y el 60% restante más de una vez al semestre.
Los materiales que más usan las y los docentes en las aulas son los audiovisuales (60%) y las fotografías (40%). Entre los documentos más relevantes en su labor pedagógica se encuentran los panfletos, afiches, testimonios orales y expedientes judiciales.
Por otra parte, el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos es la fuente más consultada por las y los docentes para apoyar sus clases en derechos humanos. 63% de las consultas fueron en línea y 19% presenciales, dato que recalca la relevancia de las tecnologías digitales para hacer disponibles y posibilitar el uso de estos materiales a lo largo de las aulas del país.
La investigadora de la línea pedagógica del proyecto y Jefa de Colecciones e Investigación en el Museo de la Memoria y los DDHH, María Luisa Ortiz, destacó que los resultados de la encuesta fueron sorpresivos porque mostró que los archivos se utilizan mucho más de lo que se esperaba y en una diversidad de clases, cursos y materias y en este contexto el desafío futuro es tener mayor apoyo desde los directivos: “No es fácil trabajar con los documentos en el aula y en la medida que esté incorporado en el currículum de manera clara, obviamente va a ser un facilitador muy relevante”. Por otro lado, el estudio ratifica la “enorme potencialidad que tienen los documentos en distintos soportes y para fortalecer su uso se requiere mayor capacitación a profesores/as para trabajar con este tipo de fuentes y propuestas didácticas. Hoy su inclusión depende mucho de la iniciativa y experiencia del profesor o profesora, más que del apoyo institucional de las escuelas”, concluyó.
Entre los elementos que pueden dificultar el uso de los archivos en la educación destacan el Proyecto Educativo Institucional (PEI) y el Plan de Mejoramiento Escolar (PME) del establecimiento, al no contemplar la incorporación de estos materiales. También pueden ser un obstáculo las definiciones del equipo directivo del establecimiento. María Luisa Ortiz explicó que a veces las y los docentes no cuentan con el apoyo de la dirección del colegio, porque lo consideran conflictivo o hay miedo de que sea tratado como adoctrinamiento de los estudiantes.
Asimismo, se le consultó a las y los docentes sobre recomendaciones para fomentar el uso pedagógico de los documentos. Entre sus propuestas destacan cambios en el currículum nacional, realizar capacitación a profesores/as sobre el uso de documentos y aspectos conceptuales del ámbito de los derechos humanos y la creación de propuestas didácticas que involucren documentos.
Lanzamiento web educativa
Además de los resultados de la encuesta, el proyecto Tecnologías políticas de la memoria lanzó la aplicación web “Viajes por las voces de la dictadura (1973-1990)”, que incluye una secuencia didáctica para el aprendizaje de los derechos humanos y el ejercicio de la memoria entre las y los estudiantes. Un trabajo que estuvo liderado por académicos de la UAH como María Soledad Jiménez, profesora de Historia y Ciencias Sociales y académica de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la UAH, Andrés Soto profesor de Historia y Ciencias Sociales y Magíster en Didáctica de la Historia de la UAH, Yasna Flos profesora de Historia y Ciencias Sociales y Magíster en Didáctica de la Historia y las Ciencias Sociales de la UAH, Isaac Calvo profesor de Historia y Magíster en Didáctica de la Historia y las Ciencias Sociales de la UAH, Sandra Piñeiro investigadora en la línea de educación del Proyecto Anillos Tecnologías Políticas de la Memoria, Martín Torres, a cargo de la dirección de arte de la aplicación web, Braulio Lledó, desarrollador de la aplicación web y Yocelyn Aracena, ilustradora del sitio.
La aplicación web es un ambiente de aprendizaje que busca motivar a las y los docentes y facilitadores a trabajar un proceso conflictivo de nuestra historia reciente, a través de una secuencia didáctica que pone en juego los archivos de Memoria y Derechos Humanos, la educación ciudadana, las habilidades de pensamiento histórico y las narrativas de los estudiantes sobre ese pasado desde su realidad actual.
Asimismo, esta aplicación pone a disposición de docentes y estudiantes de sexto básico y segundo medio una selección significativa de archivos del Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, abriendo la posibilidad de llevar el museo al aula.
Según cuenta Sandra Piñeiro, la inspiración del sitio estuvo en los archivos de la época y en encontrar la manera de ser representados simbólicamente sin caer en lo evidente: “Poner el bombardeo en La Moneda no era del caso, pero sí La Moneda oscura porque el enfoque es la resignificación. Teníamos que conectarnos con la emotividad del pasado, pero en un plano de hacer cosas y de tomar una posición por eso las ilustraciones y la estética está situada en algo que nos puede estimular y acompañar con un archivo de la época”.
Para finalizar, la profesora María Soledad Jiménez sostuvo que los resultados de la encuesta entregan un potencial de trabajo muy interesante donde la nueva plataforma puede tener un rol de colaboración: “El uso transversal de los archivos en la sala de clases es muy interesante porque habla de una cultura democrática en el interior de la escuela que no solo es responsable del profesor de historia”. Según explicó, este proyecto termina, pero lo que el equipo espera es encontrar una plataforma y un cronograma para difundirlo y ponerlo a prueba con los profesores.
“Estamos súper abiertos a la posibilidad de la conexión de aulas escolares y universitarias y traspasar lo que pudimos desarrollar durante la investigación y encuentros con los docentes y en la mayor cantidad de espacios posibles, sin miedo y aprendiendo a enfrentar el conflicto de la diferencia en un marco de respeto a los derechos humanos”.
La plataforma está disponible desde el 23 de diciembre en www.viajeporlasvoces.cl y la encuesta se publicará en el sitio https://www.memoriayderechoshumanosuah.org también durante diciembre.