Con una eucaristía, celebrada por Juan Diego Galaz SJ, Director del Centro Universitario Ignaciano (CUI) junto a Rector Eduardo Silva SJ, Jorge Costadoat SJ, el estudiante jesuita Raimundo Salas y al sacerdote belga Paul Gilbert SJ, la Universidad Alberto Hurtado conmemoró hoy el Día de la Solidaridad, instaurado en homenaje a San Alberto Hurtado, quien murió el 18 de agosto de 1952.
El sacerdote jesuita Juan Diego Galaz recordó el ejemplo de vida de San Alberto Hurtado y cómo se hizo cargo de su realidad y trabajó por mejorar la situación de los más desprotegidos de la sociedad. “El Padre Hurtado es un modelo de la vida real con todas sus tensiones. Nosotros elegimos estar aquí con los nuestros y con eso vamos a ser plenos. Aquí en esta comunidad y en este lugar concreto estamos llamados a ser nuestra mejor versión. Aquí en Centro de Santiago, en el kilómetro 0, Dios quiere hacer probable nuestra plenitud, esa es la invitación”, señaló en relación a la misión de la Universidad y la ubicación de su campus en pleno centro de la capital.
A la misa del Día de la Solidaridad asistieron el Rector Eduardo Silva SJ, el Vicerrector Académico, Pedro Milos, el Vicerrector de Integración Sebastián Kaufmann, el Vicerrector de Administración y Finanzas, Claudio Dodds, académicos, funcionarios y estudiantes.
Recordando a José Aldunate SJ en el Día de la Solidaridad (Por Nicolás Espinoza Riquelme)
Por la tarde, el conversatorio “Solidaridad y DDHH: un homenaje a José Aldunate SJ en el día del Padre Hurtado”, organizado por el Centro Universitario Ignaciano (CUI) y el Centro de Ética y Reflexión Social de la UAH, destacó la labor del “cura obrero” en la defensa y promoción de los derechos humanos durante el régimen militar en Chile.
Elizabeth Lira, decana de la Facultad de Psicología UAH, Boris Hau, Investigador en Derechos Humanos, y Juan Diego Galaz SJ, director del Centro Universitario Ignaciano (CUI), fueron los encargados de exponer sobre la vida y obra del sacerdote jesuita, la que se consagró durante la dictadura militar al ser un férreo defensor de los DD.HH.
Boris Hau, Abogado de la Universidad Alberto Hurtado, expuso sobre los escritos que realizó José Aldunate SJ para condenar los crímenes de lesa humanidad que se estaban cometiendo hacia sectores de oposición al régimen. En este sentido, en 1975, fundó la revista “No podemos callar”, la que unos años después pasó a llamarse “Policarpo”. El fin de la revista, que era realizada de forma clandestina, era “dar a conocer lo que se estaba silenciando”, dijo Boris Hau. Los textos originales de “No podemos callar” y “Policarpo” se encuentran en la Biblioteca San Ignacio. Pero hay un proyecto que quiere digitalizar las revistas y subirlas al sitio web www.josealdunate.cl.
Juan Diego Galaz SJ, habló sobre las características que comparte San Alberto Hurtado con José Aldunate Lyon SJ, en su lucha por la justicia. “Una de las cosas que une a Hurtado con Aldunate es que entienden el punto desde sus actores; desde la historia. Y eso determina el modo en que ellos se comportan -en el mundo- para hacerlo más habitable; más humanizado”.
Elizabeth Lira, decana de la Facultad de Psicología UAH, abordó el tema de la tortura en la dictadura realizando un viaje por diferentes gobiernos a lo largo de la historia, como el caso del Gobierno de Arturo Alessandri Palma y Gabriel González Videla. “Si uno recorre en la historia cuántas denuncias hay sobre tortura, hay muy poco”, explica la decana. Pero una vez instaurada la junta militar en el poder, se naturaliza la tortura, con la llegada de los cuarteles y centros de tortura, dando pie para que se levanten instituciones ligadas a la iglesia para la defensa de los DD.HH., como la Vicaría de la Solidaridad.
Sobre la realización de este tipo de actividades que abordan la vida de personajes ejemplares de nuestra historia reciente,Juan Diego Galaz SJ, comentó: “Es un momento de tradición; de decirnos quiénes somos a partir de quiénes fueron nuestros antepasados”. En la misma línea, Elizabeth Lira, expresó: “Yo creo que es muy importante que hagamos conversatorios de este tipo, pero quizás tenemos que inventar una manera para que podamos convocar a los estudiantes. No sacamos mucho con que los conversatorios sean entre las personas que nos conocemos, estamos de acuerdo, y que hemos trabajado juntos muchos años”.