El artista Fernando Prats y el director de la Licenciatura de Teoría e Historia del Arte UAH, Sebastián Vidal.
El artista Fernando Prats y el director de la Licenciatura de Teoría e Historia del Arte UAH, Sebastián Vidal.
En la actividad, el artista mostró las obras que ha realizado a lo largo de su carrera, muchas de ellas en Barcelona, otras en la Antártida chilena y otras realizadas en lugares en donde hubo desastres naturales. En la mayoría, Chile es el punto en común.
Prats hace un recorridos físico, viaja una y otra vez a Chile, de manera de responder las preguntas que se hace mientras desarrolla cada obra. Así, en el segundo Encuentro con Artistas, Prats explicó que el quiere capturar las ideas que lo mueven, que vienen atadas a su historia: contaminación, golpe de Estado, catástrofes naturales, inundaciones, humo.
La materialidad del lenguaje es el medio que tiene el artista para mostrar su arte. Él guía la mirada del espectador con el ojo de su cámara; muestra, por ejemplo, la realización de un horno que inventó para atrapar el dibujo que hace el humo dentro de él. Con esto, él deja ver parte de su obsesión: la forma del recorrido tanto del humo, la sal, el viento, el agua, los desechos, la lava, las cenizas, el recorrido de un hombre. La unión y dinamismo son elementos que él busca palpar a través de la materialidad del lenguaje.
El encuentro estuvo guiado por Sebastián Vidal, curador de la obra PANEM, en la que Prats y Claudio Di Girólamo hacen una reflexión sobre la proyección del pan en el plano religioso y social.
“PANEM consuma el deseo por conjugar la visión de dos travesías que han forjado en sus respectivos pasos una reflexión sobre el imaginario del rito cristiano y su proyección social. Así, la exposición presenta distintos estados y representaciones del pan como universo complejo y misterioso que devuelve al espectador parte de la historia de dos miradas artísticas bajo un mismo eje común: llevar a la introspección y la contemplación de la vida desde la mirada elevada de la materia y el espíritu”, explica el curador Sebastián Vidal.
Para esta muestra, los artistas crearon pequeñas y gigantes obras, siempre con el pan como concepto material y de representación. Ambos retroceden en el tiempo y recuperan técnicas que usaron hace años. Por segunda vez, Prats usó hostias, específicamente, 150 mil para el retablo titulado “He aquí las espaldas del que me ve”. La primera vez fue en 1997 en su exposición “Anastasis”, donde intervino la Iglesia Nuestra Señora de la Divina Providencia, en dónde intervino el espacio religioso con piezas hechas con vidrio, cera, papel ahumado, madera y hostias.
Claudio Di Girólamo, por su parte, recuperó la gypsografía, técnica de grabado con yeso que usó en 1958 cuando creó Panem, el mural de 2 por 6 metros, en el que representó una cena con Jesús en el centro.
Fernando Prats