Con la presencia del Rector, Eduardo Silva SJ, el Vicerrector de Integración, Sebastián Kaufmann, la Vicerrectora de Investigación y Postgrado, Paula Barros, el Vicerrector Académico, Pedro Milos, el Secretario General José Miguel Burmeister, y el Director del Centro Universitario Ignaciano (CUI), además de estudiantes y trabajadores de la UAH, se realizó la inauguración del espacio estudiantil Vicente Huidobro.
Este espacio dedicado a los estudiantes, es una planta abierta de 350 mt2 y cuenta con equipamiento para estudio, reuniones y descanso. Esta primera planta también alberga oficinas del Centro Universitario Ignaciano (CUI) y una salida hacia el pasaje Vicente Huidobro. En el segundo piso de la casa se ubican las oficinas de las diversas unidades de la Vicerrectoría de Integración.
Al iniciar la ceremonia el Vicerrector de Integración, Sebastián Kaufmann, agradeció a la Fundación Mar Adentro, al arquitecto Ernesto Labbé, a Tomás Fuenzalida de la Dirección de Infraestructura y Servicios, y a los trabajadores y contratistas que hicieron posible transformar este espacio. “Lo mejor es dejar que los espacios hablen por sí solos. En este lugar tenemos en primer lugar el mural de Zanmi que representa un proyecto con migrantes haitianos que habla de acogida, de participación de estudiantes y de la colaboración de Mar Adentro que también participó en la creación de este mural. Queremos que este sea un espacio de acogida y de vinculación con el medio. En segundo lugar tenemos el nombre de este espacio que hemos llamado espacio estudiantil Vicente Huidobro por el pasaje que lleva el nombre del poeta. Queremos que este espacio sea un espacio de arte y de creatividad. Es un gran sueño que se está cumpliendo y habla de la voluntad de que los estudiantes estén al centro de la universidad y ese es el corazón de la universidad y aquí queremos acogerlos”, señaló.
El arquitecto Ernesto Labbé se refirió al trabajo de remodelación de las tres casas que dieron lugar al primer piso y a las otras tres viviendas en que ahora se encuentran las oficinas del segundo piso. “En este lugar había seis casas, tres en el primer piso y tres en el segundo, con muros de ladrillo y madera. Debimos despejar las estructuras de la casas de manera de dar continuidad a los espacios. Le pido a los estudiantes, académicos y administrativos que cuiden este lugar y lo mantengamos como un espacio común”.
El sacerdote jesuita Rubén Morgado, Director del Centro Universitario Ignaciano (CUI) agradeció por este espacio de encuentro y lo bendijo: “Que este gesto simple en que el agua toca estos materiales nos ayude a que podamos tener contactos humanos más dignos y mejores cada uno y cada una en el trabajo que desarrollamos juntos”.
Finalmente, los asistentes realizaron un recorrido por las nuevas dependencias.