En el marco de la conmemoración de los 26 años de la Universidad Alberto Hurtado (UAH), la Vicerrectoría de Integración -a través de la Unidad de Participación Estudiantil (UPE)-, lanzó durante octubre el concurso de cuentos breves “UAH en 101 palabras”, certamen que tuvo su ceremonia de premiación en la Biblioteca Central de nuestro campus.
La instancia contó con la presencia de Sebastián Kaufmann, vicerrector de Integración; Guadalupe Ovalle, directora de la Biblioteca UAH; Pablo Walker, capellán de la universidad; y Juan Williams, director de la UPE, además de funcionarios, familiares de las ganadoras y estudiantes de la UAH.
A lo largo de estos años, la Universidad Alberto Hurtado ha desempeñado una labor ligada al bien común, reafirmando su misión formar profesionales de excelencia, pero que posean también compromiso y empatía social, apostando por un mundo más justo y equitativo. Por ello, la temática de este concurso fue “Universidad para el bien común”, incluyendo enfoques relacionados a materias de género, diversidades e inclusión.
Con esta premisa, Valentina Aburto, estudiante en Lengua Castellana y Comunicación, creó el relato “De todas las estrellas, Venus”, obra que obtuvo el primer lugar. Al recibir esta distinción, Valentina expresó que “es raro estar aquí por el atrevimiento a compartir lo que escribo… El rol como profesora me ha permitido conocer de otra manera la motivación por la escritura y, con respecto al cuento, uno de mis referentes artísticos es Violeta Parra. En una de sus décimas, ella dice que hay ‘costras en los corazones’, y también cantaba por la diferencia. Siento que desde ahí me sitúo como autora”.
El segundo lugar lo obtuvo Constanza Troncoso, estudiante de Pedagogía en Artes Visuales, quien escribió el texto “La Falda”. Sobre este premio, la estudiante señaló que sus ganas de escribir nacen desde sus ideales políticos: “Creo que las palabras son necesarias para transmitir todo lo que sentimos. Solo me queda agradecer a los organizadores por permitirme estar aquí. Deseo seguir escribiendo, porque me niego a vivir en un mundo donde no pueda habitar la sensibilidad”.
En tanto, Antonia Rubio, estudiante de Lengua Castellana y Comunicación, obtuvo el tercer lugar con “Medusa”, cuento inspirado en sus amigas. “Mi relato nace a partir de la admiración que les tengo. Ellas me han animado a sentirme cómoda siendo una mujer en Chile y es un agradecimiento a ellas y a todas las mujeres que conforman la universidad, como nuestras profesoras, que nos animan a pensar y cuestionar los mandatos sociales y de género que vivimos. En lo personal, creo que la universidad es un espacio muy cómodo para cuestionar mi realidad y reflexionar cómo quiero transformar el mundo con el que sueño”.
La universidad como espacio para la diversidad
Como mención honrosa se destacó a Giuliana Lagos, estudiante de Psicología, quien escribió el relato “Configurar la llama”. Giulia contó que se inspiró en sus propias vivencias: “Vengo de un entorno donde no hay espacio para la diversidad y todo es homogéneo. Es una zona rural y uno debe ajustarse a eso. Acá en la universidad nosotros debemos configurar el entorno, haciendo una apertura a la diversidad; nosotros ajustamos la llama”. Además, la estudiante agregó que estas iniciativas son una buena instancia para atreverse y confiar en los propios talentos: “Esta es la primera vez que me animo a enviar un trabajo en un concurso de estas características”, confidenció.
Al igual que Giuliana, Salomé González, estudiante de Gestión de Información, Bibliotecología y Archivística, se alzó con una mención honrosa por su cuento titulado “Colores”, el que nació a partir de los aprendizajes que le dejó su pasantía en el Museo de los Derechos Humanos. “Cuando llegan de visita los colegios me he fijado en que ahora se les permite a los/as estudiantes llevar el pelo largo o teñido, y eso es algo muy diferente a lo que me tocó vivir a mí cuando iba al liceo. Desde ahí parte mi historia, y quise darle una vuelta positiva a ese cambio. Desde mi percepción puedo decir que estamos un poco mejor que hace 10 años en lo que respecta a la comunidad LGTB en Chile. Espero que eso no se pierda”, compartió Salomé.
Finalmente, Remy Núñez, estudiante de Arqueología, también fue reconocida en el concurso “UAH en 101 palabras” por el cuento “Nuestra existencia en la universidad”, relato que ahondó en el reconocimiento espontáneo entre personas que comparten alguna característica, y cómo a través de este vínculo se puede construir una universidad más inclusiva.
Para los organizadores, esta ceremonia constituyó un momento de encuentro y reflexión, en el que se reconoció la dedicación y pasión de nuestras/os estudiantes por la escritura, una muestra más de la curiosidad y el deseo de aprender de quienes conforman nuestra comunidad hurtadiana.
¡Felicitamos a cada una de las personas que participaron en este concurso por abrir sus corazones, escribir con valentía y aceptar nuevos desafíos intelectuales!