La no presencialidad que hemos vivido los últimos 9 meses, nos reta a pensar nuevos modos de enfrentar el proceso de enseñanza-aprendizaje y el proyecto Zanmi, clases de español para la comunidad haitiana, no ha quedado ajeno a este desafío.
Originalmente la instancia contempla en su metodología una planificación semanal que incorpora clases de español para la comunidad haitiana de Estación Central, dos veces a la semana. Los días jueves, las clases se realizan en dependencias de la UAH donde participan alrededor de 60 personas y los días sábados, en Población Los Nogales instancia en la que participan más de 150 adultos/as haitianos/as, por lo que el contacto con los socios comunitarios es regular.
El contexto actual de crisis sanitaria ha requerido adaptación y cambios en la metodología original. Los días jueves ya no se están desarrollando clases en la Universidad, pero si continúan los sábados de manera virtual, a través de Facebook, trabajando en grupos pequeños que se juntan a conversar para reforzar el idioma.
Pese a no continuar con las clases los días jueves, el proyecto extendió sus redes y se vinculó con otros 4 socios comunitarios.
Entre septiembre y diciembre, los/as estudiantes de la UAH trabajaron semanalmente aclarando dudas sobre el proceso constituyente a extranjeros/as residentes en Chile, a través del espacio “Todos participamos”, además otro grupo brindó colaboración a través de la plataforma MIGRAPP del SJM apoyando en tema regularización para extranjeros. También, se vincularon con la Escuela NOVOMAR de la comuna de Puente Alto, donde trabajaron con el equipo Directivo y docente para, y como hito de cierre, realizar una guía de educación intercultural que dejaron para el plantel. Por último, los/as estudiantes trabajaron en conjunto con un grupo de ex estudiantes de la UAH que forman parte de la Asociación de Consumidores AGRECU, en distintas iniciativas para el levantamiento de información y difusión de los derechos de consumo para la población migrante.
“Pese a que se perdió el contacto físico, no perdimos el vínculo, si bien las clases presenciales generan cercanía e identidad al proyecto, logramos igualmente con la virtualidad seguir en contacto con la comunidad de una manera distinta, lo que es un desafío en el contexto virtual. Los años de trabajo con la comunidad nos han permitido seguir trabajando e innovar en este nuevo escenario. Si bien es complejo, porque la barrera digital es un factor que antes no teníamos, siempre es bueno innovar y ver qué fortalezas tiene la comunidad y de qué manera podemos colaborar mutuamente, la gran fortaleza de ZANMI, es que somos un grupo de amigos/as y que los años de trabajo han afianzado el proyecto, logramos en un primer momento ver cómo podíamos continuar y con qué herramientas contábamos para este año 2020. No estaba en nuestra mente, dejar de vincularnos, más bien queríamos seguir trabajando, pero ahora con nuevas herramientas” Es lo que nos mencionó Andrea Espinoza, Coordinadora del Área Social del CUI.
Por su parte Bárbara Fernández, Coordinadora y Docente Proyecto Zanmi, concluyó “La experiencia de trabajo en aprendizaje servicio este año 2020 ha sido muy desafiante, ya que hemos extendido nuestras redes con distintas comunidades con quienes el Proyecto Zanmi no había trabajado anteriormente, lo que si bien al principio fue difícil de planificar en el contexto de pandemia, nos permitió encontrar nuevas formas de llegar a las comunidades y además diversificar los espacios de trabajo y servicio para los/as estudiantes UAH. Esto fue muy agradecido por los/as estudiantes, quienes a pesar de la virtualidad, pudieron conectarse, dialogar y colaborar directamente en el trabajo que realizan nuestros socios comunitarios, entregándole una significancia especial a su paso por la universidad este año, y poniendo a disposición sus herramientas personales y disciplinares para apoyar concretamente a distintas personas y comunidades”.