Evelyn Hevia, académica de la Facultad de Psicología UAH.
“Creativa, solidaria y valorada por sus pares y por los estudiantes”, así describe la decana de la Facultad de Psicología de la Universidad Alberto Hurtado, Elizabeth Lira a la académica Evelyn Hevia Jordán, quien trabaja desde el 2011 en la Universidad Alberto Hurtado y ahora viaja a Alemania a estudiar un doctorado al Lateinamerika Institute de la Universidad Libre de Berlín (LAI). Una experiencia de alta exigencia académica que dura cinco años, y donde investigará junto con el profesor Stefan Rinke, Director del Instituto de Estudios Latinoamericanos y Profesor de Historia de América Latina de la U. de Berlín.
“Espero encontrar nuevas lecturas, aprendizajes y colegas que me permitan dislocar y problematizar mi foco de análisis, para comprender desde una mirada compleja en términos teóricos y políticos, el fenómeno de la ex Colonia Dignidad”, cuenta Hevia quien parte de su trayectoria ha sido profundizar en el conocimiento de la memoria y la reparación de las víctimas de violaciones a los derechos humanos en nuestro país. Lo que la llevó a trabajar en el archivo oral de la Villa Grimaldi y luego en colaboración con las agrupaciones de víctimas, desarrollar formas de trabajo sobre los efectos de la violencia y violaciones a los derechos humanos ocurridas en Colonia Dignidad. Sobre estos temas trabajará en su doctorado en Alemania.
Parte del desempeño en la Facultad de Psicología se inicia cuando llegó por un reemplazo académico en el área de psicología social comunitaria, y luego se hizo cargo de la coordinación académica de la carrera. Evelyn Hevia es Licenciada en Psicología y Psicóloga de la Universidad de Artes y Ciencias Sociales (ARCIS), con Diploma en Metodologías Cualitativas en Investigación Psicosocial, de la Universidad de Chile, Magíster en Historia, Universidad de Chile. Ha formado parte del comité de ética de la investigación de la facultad destinado a la asesoría los estudiantes de Magister para cumplir con los estándares éticos en las tesis; su trabajo ha sido una enorme colaboración para garantizar el respeto de los derechos de las personas que forman parte de los procesos de investigación. Ha dirigido la publicación periódica (3 a 4 números al año) de “Psicología Hoy”, desde al menos 2014, garantizando su calidad y continuidad, representando diversas visiones y temas de la psicología contribuyendo a la visibilidad de la Facultad y ha tenido un rol central en diversas iniciativas de investigación y publicaciones. “Es una gran persona de lo que todos nos hemos beneficiado”, dice la decana.
La casa de estudios que la espera en Europa es la Universidad Libre de Berlín, una de las más grandes y prestigiosas de Alemania con estatus de “universidad elite” por la calidad de sus programas orientados al futuro, calificación que comparte con otras 9 universidades y, en términos prácticos, significa presupuestos adicionales para la investigación, así como admisiones restringidas. Por lo mismo el proceso de admisión es muy complejo. Para Evelyn no fue fácil.
Lo primero que hay que entender es que su relación con el país germano empezó en el 2013 cuando trabajó en la publicación de Laika Verlag, una editorial alemana que quiso hacer una trilogía de libros con motivo de los 40 años del Golpe, y en el 2014 la profundiza cuando estudia a la ex Colonia Dignidad. “Alemania era un destino apetecido, pero muy difícil por el idioma. En ese camino me encontré con un amigo que me comentó la posibilidad de trabajar en español con algunos profesores del LAI (Lateinamerika Institute de la Universidad Libre de Berlín)”. Navegando por la web dio con Stefan Rinke, profesor de la línea de historia de LAI y le escribió con miras de postular a la beca del DAAD (equivalente al Conicyt pero alemán).
“Él me contestó en un par de horas y me pidió que escribiera un proyecto. Me puse tres meses a trabajar en esa tarea y en junio de ese año se la envié. El leyó mi propuesta y me aceptó. Con su carta de aceptación postulé a la beca DAAD, pero ese año fue mi primer encuentro con la frustración porque en marzo de 2017 recibo la noticia que no me gané la beca y estaba convencida que me la ganaría”, comenta.
Decidió volver a postular. Solicitó una entrevista con el director de DAAD para pedirle feedback y él le dijo dos cosas: empieza a estudiar alemán y postula a la beca Conicyt DAAD. Elizabeth Lira y sus colegas fueron claves en esa etapa porque la animaron a postular de nuevo. “Así que empecé a ir a clases de alemán al Goethe y postulé de nuevo. Mismo proyecto, mismo proceso y en noviembre tuve la noticia que mi postulación había sido la 2ª mejor evaluada por DAAD”, dice.
-¿En términos académicos qué implica para ti dar este paso?-
-Es un tremendo paso. Porque he seguido un camino bien diferente a otros colegas de mi generación, primero me doctoré de mamá (mi hija ya tiene 15 años) y ahora con un contrato académico y una pega que me encanta decido dejar toda esta zona de confort y partir. ¿Por qué? Porque hoy la academia exige el doctorado y en 5 años más probablemente el post doc, y por más trayectoria que tenga, el no tener el doctorado me deja fuera de muchas opciones para concursar a fondos de investigación y acceder a otras fuentes de financiamiento. Es una apuesta arriesgada, pero con la madurez que me han dado los años, creo que voy con un camino recorrido que me permitirá aprovechar a concho esta experiencia.
-¿Qué línea de investigación realizará en Alemania?-
-Mis temas tienen que ver con la memoria y la reparación de las víctimas de violaciones a los derechos humanos, en ese contexto la convergencia disciplinar entre psicología e historia parece no tan forzada, ejemplo de ello es el trabajo de Elizabeth Lira. Así que seguiré en esa línea, pero también espero en el doctorado ir encontrando nuevas lecturas, aprendizajes y colegas que me permitan dislocar y problematizar mi foco de análisis, para comprender desde una mirada compleja, en términos teóricos y políticos, el fenómeno de la ex Colonia Dignidad.
-Son cinco años de estudios. La apuesta implica la excelencia en el campo de la historia y la psicología, pero más allá del conocimiento. ¿Qué esperas de la experiencia?
-Espero una experiencia de aprendizaje cultural y sobre todo el idioma, para mí ese es uno de los grandes desafíos. Espero también una experiencia para mi hija, que está muy ávida de este nuevo camino. Espero poder encontrarme allá con los orígenes de la Colonia Dignidad, revisar la documentación en los archivos, encontrarme con las víctimas que se fueron y poder hacer una contribución a esta temática. Por último, aprender y experienciar el trabajo en memoria y DDHH que ha hecho Alemania, que, por su misma historia, nos lleva un trecho adelantado.
-Una vez cumplidos los cinco años el plan futuro ¿Cuál es? –
– Regresar a Chile y, por cierto, a la Alberto Hurtado.