Tanto en Chile como en el resto del mundo, el alza en el precio de la vivienda se ha vuelto un tema crucial, ya que cada vez es más difícil acceder a ella para parte importante de la población. La teoría y evidencia muestra que este crecimiento se debe en gran parte a un aumento sostenido del precio del suelo, es decir, el costo del espacio físico donde las residencias se construyen. El suelo es un bien económico especial, ya que no se deprecia; y su valor depende de las rentas de sus posibles usos y actividades, dependiendo de cuánto suelo demanden y en qué localizaciones específicas.
En Chile, académicos y representantes de la industria inmobiliaria reconocen al suelo como uno de los factores que encarecen los proyectos de vivienda y favorecen la segregación y exclusión socio-residencial. Sin embargo, no existen trabajos que estudien el alza en el precio del suelo urbano en las últimas décadas ni índices para medir su variación en el tiempo, como sí existen en el caso de la vivienda y otros bienes o activos. El Banco Central ha avanzado en ello, estimando el valor total del suelo residencial pero sin evaluar su evolución en el tiempo.
En este contexto, el objetivo de este Índice (IPSS) es lograr estimar el incremento del precio del suelo y conocer cómo se encarece en aquellas zonas donde -posiblemente- se concentra la demanda. La metodología está basada en un índice Laysperes encadenado. Esto implicó dividir la ciudad en distintas zonas y estimar un precio promedio del suelo en cada una de ellas por períodos, a partir de datos de oferta de suelo de Trivelli y Cía. Ltda. Luego, se evaluó el crecimiento del precio del suelo en cada una de las zonas por separado para cada período, y se ponderó de forma trimestral de acuerdo a la superficie de cada zona en la ciudad.
“Creemos que este Índice es un aporte clave, ya que permite entender de mejor forma cómo se comporta el precio del suelo en el Gran Santiago, ya que evidencia que el crecimiento del valor del suelo se da justamente en aquellas zonas en las que aumenta la oferta y hay mayor dinamismo de mercado”, comenta Ivo Gasic, investigador y académico del Departamento de Geografía de la UAH.
A su vez, Clemente Larraín, coordinador de estudios y política pública de Déficit Cero, añade: “El valor del suelo está muy relacionado a otras variables como la tasa de interés, el crecimiento económico, el precio de la vivienda y la demanda habitacional. La desagregación territorial del Índice muestra la consolidación de un cono de alta renta, constituido por las comunas de altos ingresos del sector nororiente de la capital”.
Los resultados del estudio se entregarán el lunes 19 de diciembre a las 16 horas en la Sala de Litigación de la UAH, a través de un panel que contará con la presencia de los investigadores a cargo y con la participación de Francisco Sabatini, Ph.D. en Planificación Urbana por la Universidad de California y Marcela Ruiz-Tagle, economista y exsubgerente de estudios de la Cámara Chilena de la Construcción.