Este jueves fue presentado el Manual de Adaptabilidad Laboral para la Incorporación de Mujeres al Mundo del Trabajo, guía publicada como parte de la ejecución del proyecto Fomento a la Igualdad de Género en el Trabajo que se inserta dentro de la acción de cooperación de la Unión Europea en el ámbito de igualdad de género en el trabajo. En este proyecto la UAH participa como ejecutante y la Fundación ChileMujeres, como solicitante.
Este manual, segunda publicación del proyecto UE – U. Alberto Hurtado pretende dar a conocer las medidas que pueden adoptar las empresas para organizar los tiempos de trabajo y descansos de sus trabajadores y trabajadoras, con la finalidad de que estos puedan responder a sus responsabilidades familiares, sin afectar el cumplimiento de sus obligaciones laborales, dentro del marco legal y/o a través de acuerdos individuales o colectivos.
En el encuentro, el ministro del Trabajo y Previsión Social, Nicolás Monckeberg señaló que desde la década de los 90 en Chile se ha logrado avanzar en muchos temas gracias a que se ha llegado a concesos que han permitido que nuestro país sea lo que es hoy. “Sin embargo, en materia laboral hemos ido un poco atrasados y las culpas son compartidas. Creo que hay una dosis de desconfianza que nos ha ido produciendo año tras año una especie de bloqueo donde a uno le hablan de la palabra sindicato y uno se asusta y dice no quiero sindicato en mi empresa, o le dicen flexibilidad laboral y también se asustan”.
Sobre la adaptabilidad laboral, Monckeberg dijo que ésta se aplicaba a todos los trabajadores porque tanto hombres como mujeres deben cumplir su rol parental. Enfatizó también en que la adaptabilidad “es una necesidad de justicia, es lo contrario a la precariedad laboral. La precariedad laboral excluye, humilla, denosta y se aprovecha de la necesidad del trabajador quien para no perder la pega acepta cualquier condición. Una buena adaptabilidad laboral, la que mantiene los límites y promueve el respeto hacia el trabajador, es inclusiva y permite que, personas que hoy día se sienten excluidas porque las obligan a trabajar un número determinado de días en un lugar determinado, se pueda abrir las puertas al teletrabajo”.
Por su parte, la senadora e integrante de la Comisión de Trabajo del Senado, Carolina Goic, indicó que, “en este manual hay muchas cosas en que hemos avanzado y que están en la legislación actual y que hay que utilizarlas. Podemos discutir y necesitamos las leyes para resolver temas como la jornada de 41 o 41 horas, pero por otro lado cuando existe la voluntad, cuando se han enfocado bien las necesidades de la empresa y la de los trabajadores, logrando alinearlas, es mucho más fácil lograr acuerdos. Es importante avanzar en acuerdos, cuando somos capaces de poner sobre la mesa objetivos que compartimos y que nos benefician a todos en el mundo del trabajo, las cosas fluyen mucho mejor”.
Sobre la discusión sobre la reforma laboral, la senadora comentó que “hoy día el mayor riesgo que tenemos es el de reducir el debate, es cuando hablamos si respaldamos un proyecto o respaldamos el otro y ahí nos perdemos. Yo creo que, si estamos en un mundo que es cambiante, donde enfrentemos la Cuarta Revolución Industrial y no sabemos cómo van a ir evolucionando los puestos de trabajo, lo esencial es que salgamos de esa lógica de polarización, el mundo futuro no se va a debatir entre la izquierda y la derecha, el desafío es entre el pasado y el futuro. Y esa opción de futuro requiere de lógicas más dialogantes de espacios de acuerdos y conversación. No podemos responder al futuro con las mismas respuestas de antes”.
El encuentro finalizó con un panel moderado por Laura Albornoz que contó con la participación de Verónica Campino, directora de ChileMujeres, Lorena Matamala, presidenta del sindicato número 3 de GASCO, José María Revilla, jefe de Relaciones Laborales de Movistar y Yerko Ljubetic, ex ministro del trabajo.