Cuando se habla de potenciar aprendizajes en espacios universitarios y de educación superior, suele pensarse en la figura del profesor como agente clave en la construcción de los aprendizajes de los estudiantes. Pocas veces se considera que las interacciones entre los mismos estudiantes —en el desarrollo de una clase— así como las ayudantías —donde un estudiante de semestres superiores demuestra experticia en un campo disciplinar— pueden ser espacios en los que se construye aprendizaje de manera mutua. Es sabido que se aprende en conjunto con otros y que un adecuado proceso de enseñanza facilita el aprendizaje de los estudiantes.
Es indudable que aunque la figura del ayudante es muy conocida y “utilizada” en los espacios de enseñanza aprendizaje universitarios, no lo es tanto como objeto de investigación. ¿Cómo caracterizar al ayudante? ¿Cuál es su rol? ¿Cuál es su papel en la construcción de aprendizajes en sus compañeros tutoreados? ¿Cuál es el impacto en su forma de aprender al enseñar? ¿Es consciente el ayudante de los beneficios que le trae enseñar a otros? Estos son algunos de los interrogantes que nos desafían a indagar sobre su figura en espacios universitarios y de educación superior.
En este manual se destaca que el rol del ayudante abre oportunidades de aprendizaje para que los estudiantes, a quienes acompaña en su formación, aprendan de manera significativa. Se ilustra el modo en que los ayudantes planifican y desarrollan su ayudantía, las acciones y estrategias planteadas reflejan una forma profunda y reveladora de acercarse al aprendizaje. Diseñar ayudantías con este propósito impacta también en la forma como el ayudante aborda su propio aprendizaje.
Piedad Cabrera-Murcia, autora del manual, posee el título de Educadora Especial por la Universidad Pedagógica Nacional de Colombia. En el periodo 2000-2006 obtuvo el grado de Magister en Ciencias de la Educación, Facultad de Educación, y Doctorado en Psicología, en la Escuela de Psicología, de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Posteriormente realizó un posdoctorado en el Centro de Estudios y Desarrollo de Talentos-PENTA UC. Desde el año 2013 trabaja en la Universidad Alberto Hurtado, donde centra su actividad profesional y de investigación en el ámbito de la docencia universitaria, con especial interés en indagar sobre cómo diseñar espacios de enseñanza-aprendizaje que potencien el aprendizaje activo de los estudiantes y que a su vez permita aprender a quien realiza las funciones de enseñar.